Si algo espero que caracterice a este blog y sus reviews, es la variedad, así que el próximo tema a analizar será la nueva entrega de una serie que todos recordarán seguramente: Star Trek.

Mientras tanto aprovecho para expresar la angustia mental que me corroe ya que, exiliado como estoy en España, y con lo pésima que resulta la programación cruzando el charco, no tengo idea de dónde podré ver (si es que puedo verlos) los Oscares, como no sea a través de un canal de paga.

Empezaré por decir que me niego a pagar por un espectáculo que millones de personas verán gratis (aún cuando sea con el pésimo doblaje simultáneo en México). Además, así como al cofrade Hamlet, muchos de los ganadores suelen producirme entripados (es lo malo de apostar por los que deberían ganar y no por los que la Academia adore ese año), y para pagar por hacer corajes ya hay muchos sitios donde hacerlo.

En fin, expresadas mis protestas seguiré buscando un canal abierto que los transmita y me preparo a llorar de madrugada cuando El Señor de los Anillos se lleve al menos cinco estatuillas.